domingo, 24 de agosto de 2008

Mes amis...les Carpentier!

Pascale et sa belle sourire!

Alan, Pascalle et la Joanna à La Palmyre.

Tamara, Luna et Joanna ... la beauté et la jeunnesse!

sábado, 23 de agosto de 2008

Perder la capacidad de asombro

Como ya se habrán dado cuenta, la noticia del verano –además de los Juegos Olímpicos de Beijing, ha sido el accidente aéreo en Madrid.
A nosotros nos pilló fuera de España. Fue sólo tocar tierras españolas para que todas mis sospechas se convirtieran en certezas.
¿Qué quiero decir? Pues, que acorde con esa especie de enamoramiento malsano de los medios de comunicación por exaltar la nota roja por sobre todas las cosas, esta terrible circunstancia ha sido aprovechada sin escrúpulos por esos mismos medios que, se supone, están para informar. El problema es que ya ni eso hacen.
Al mejor estilo gringo de crear “programas especiales” con algún título sensacionalista, muchos tendrán (tendremos) que soportar una y mil veces las mismas imágenes de la tragedia, los numerosos videos y las fotografías enviadas por aficionados (muchos seguramente las venderán al mejor postor), el exhibicionismo de minutos de silencio en plazas y ayuntamientos, y las noticias “de última hora” (que siempre son las mismas) desde el aeropuerto de Barajas, el hotel donde están concentrados los familiares de las víctimas o el tanatorio de la Almudena, donde están llevando a los cadáveres sin identificar.
Juan Varela, un lector del periódico Público, lo comentaba de esta manera:
“Todas las víctimas tienen derecho a la intimidad. Y todos los periodistas deberían saber y ser conscientes de dónde está el límite entre la información relevante, incluso para provocar la reflexión del público, y el sensacionalismo. No se evita sólo con la ausencia de vídeos y fotografías. El sensacionalismo está en las horas de programación sin nada que contar, en la redundancia de las preguntas a los deudos de los muertos y heridos más allá del retrato indispensable de los efectos de la tragedia”.
Ustedes, ¿qué opinan?

viernes, 22 de agosto de 2008

Muchas gracias

A mi no me gustaba cumplir años. El único que me recordaba la cercanía de la fecha y me ofrecía varias posibilidades para festejarla, era mi papá. Cuando él murió, me di cuenta de lo mucho que había perdido por mi tozudez y mi tontería al no querer celebrar un año más de vida. Esta vez fue distinto. Y lo disfruté.
Como decía una tarjeta virtual que me mandó mi amiga Ale Falconer, con la edad la vida cobra otra perspectiva y esto nos permite disfrutar de lo que nos brinda a manos llenas. Muchas gracias a todos los amigos y las amigas que se acordaron de mi cumpleaños y les prometo seguir alimentando este diario para que sepan por donde ando.

miércoles, 13 de agosto de 2008

¡Feliz cumpleaños!


Volver a los 17, después de cumplir 50. Algo tiene que ver con la canción de Violeta Parra donde nos decía que el amor con sus esmeros al viejo lo vuelve niño. Digamos que a la madurita la torna más joven para volver a ser de repente tan frágil como un segundo. ¿Será que cuando cumplimos años es inevitable hacer un recuento de lo que hemos vivido? ¡Y lo que nos falta por vivir!
¿A qué hora se me ocurrió que se podía empezar a los 50? Ya lo dijo la Parra: es algo que no lo explica ni el más ancho pensamiento. Se me ocurrió y ya está. Sin más. ¿Que no se supone que a estas alturas de la vida, una debe pensar en el no muy lejano retiro, en una cómoda pensión, en la seguridad de un trabajo o en la conveniencia de un cargo público? Pues, sí y no.
Mi apuesta siempre ha sido por el disfrute y la gratitud. El Carpe Diem es mi filosofía y mi camino. Este lunes 18 de agosto empiezo a vivir una nueva década. Espero, anhelo, que sea tan espléndida como las anteriores y que encuentre salud y felicidad como hasta hoy.
¡Feliz cumpleaños, Laurita!

martes, 12 de agosto de 2008

Del trapo y la lentejuela

A pocos días de haber comenzado los Juegos Olímpicos de Beijing, no puedo quitarme de la cabeza aquella canción que hace muchos años cantara Silvio Rodríguez donde hablaba de “las lucecitas montadas para escena” y del “júbilo hervido con trapo y lentejuela”. Lo siento pero no puedo evitar pensar en las múltiples maneras que tiene el ser humano para “hacerse de la vista gorda” y regodearse en la forma para evitar asomarse al fondo.
China es hoy el gigante que amenaza con quitarle la supremacía mundial a las grandes potencias. Es la GRAN ECONOMÍA capaz de desestabilizar las economías de todos los países del mundo. El enorme país que se ha convertido en el primer exportador mundial y en el principal consumidor del planeta. Con una población de mil 350 millones de personas, su PIB (producto interno bruto) duplica cada ocho años y, en 2008, debería rebasar el 11%. Ya es la tercera economía del planeta, aventajando a Alemania; sobrepasará en 2015 a Japón y debería superar a Estados Unidos en 2050. Cuenta con los rascacielos, los estadios, las instalaciones deportivas y los aeropuertos más espectaculares del mundo. Y, con toda seguridad, de estos grandes logros se hablara en los próximos días.
Hace algunos años, cuando se comenzó a hablar del “milagro chino”, un conocido periodista de radio exclamaba con la boca llena de saliva: “ojalá los mexicanos nos pareciéramos a los chinos y trabajáramos con tanto empeño como ellos. ¡Qué aeropuertos, señores! ¡Qué rascacielos y qué autopistas! Ojalá fuéramos como los chinos”. Palabras más, palabras menos, eso anhelaba nuestro destacado comentarista.
Frente a las imágenes que nos han llegado antes, durante y después de la inauguración de Beijing 2008, calificada por muchos como “majestuosa y fuera de serie” (¿es que no todas las aperturas son calificadas de la misma manera?), es muy fácil que algunos se queden boquiabiertos y deseen parecerse a los chinos. Yo, desde luego, no quiero.
China es el país con el mayor récord de ejecutados a muerte en el mundo con más de 7.000 ejecuciones capitales al año, o sea el 80% de todas las penas de muerte aplicadas en el planeta; ha batido todas las marcas en el número de periodistas encarcelados por ejercer su oficio y en el número de presos políticos por pensar contrario al régimen, y las violaciones a los derechos humanos son innumerables y bien conocidas por todos.
Para poder construir todos los estadios e instalaciones deportivas que hoy nos sorprenden, el gobierno chino expropió, primero, a base de amenazas y desalojos, a los propietarios pobres de los terrenos que servirían para levantar el circuito deportivo. Les pagó cualquier cosa. Luego, explotó a miles de trabajadores que, una vez terminada la “espectacular” obra, fueron echados por la policía para demoler las barracas que los habían albergado durante siete años.
Yang Chunlin, un ciberdisidente de la ciudad china de Jiamusi, fue enviado a un campo de trabajos forzados a principios de este año por recoger firmas en contra de la celebración de los Juegos Olímpicos. Yang Chunlin fue el creador de la campaña “Queremos los derechos humanos, no los JO”.
Entre sus aliados, China cuenta con el apoyo y la colaboración de países como Birmania, Sudán y Corea del Norte. La masacre de los monjes desarmados perpetuada el año pasado en Rangún (antigua capital de Birmania), fue vista por Pekín como “un asunto interno” que, sin embargo, fue resuelto con armas chinas.
Así que, si tú eres uno de los potenciales cuatro mil millones de espectadores que vieron la transmisión de la inauguración de los Juegos Olímpicos de Beijing y que seguirá con atención el desarrollo de los mismos, te voy a pedir que no te quedes en el oropel y los fantásticos fuegos artificiales, pasa de la lentejuela y las lucecitas y no pierdas de vista los siguientes datos proporcionados por el periodista Ignacio Ramonet en una reciente editorial publicada en Le Monde Diplomatique:

“China ya posee unos 250.000 millonarios en dólares. Pero las políticas liberales del sistema también han aumentado las desigualdades entre ricos y pobres, entre ganadores y perdedores. Unos 700 millones de chinos -47% de la población- viven con menos de dos euros diarios, y, de ellos, unos 300 millones con menos de un euro diario. Porque el "milagro" está basado en la represión y la explotación de una inmensa hueste de trabajadores (los que fabrican para el mundo entero toda clase de bienes de consumo baratos). A veces trabajan entre sesenta y setenta horas semanales por sueldos inferiores al salario mínimo. Más de 15.000 obreros mueren cada año en accidentes laborales.
Los conflictos sociales están aumentando anualmente un 30%: huelgas salvajes, revueltas de pequeños campesinos, además de escándalos de los niños esclavos. El actual contexto es propicio al descontento. Pues en China, como en muchos países, el incremento de los precios de los alimentos y de la energía (el 19 de junio el gobierno aumentó el precio de los carburantes un 18%) se traduce en una subida de la inflación -que ya alcanzaba el 7,7% en mayo- y una consiguiente degradación del nivel de vida”.


Las autoridades, dice Ramonet, temen la amenaza de una inflación que desestabilice la economía popular a niveles tales que provoquen manifestaciones de cientos de miles –sino es que hasta de millones de personas, semejantes a las que el ejército chino aplastó en la plaza Tiananmen en junio de 1989.
Encima, está el peligro de una catástrofe ecológica que cada día preocupa más a los ciudadanos no sólo de China, sino del mundo entero. El propio ministro del Medio Ambiente chino, Pan Yue, admitió en abril del 2005 al periódico alemán Der Spiegel: "Cinco de las ciudades más contaminadas del planeta se hallan en China; las lluvias ácidas caen sobre un tercio de nuestro territorio; la mitad de las aguas de nuestros siete principales ríos son inutilizables; un tercio de nuestra población respira un aire muy contaminado. En Beijing, entre el 70% y el 80% de los cánceres tienen por causa el medio ambiente degradado".


Pasemos del júbilo hervido; no nos quedemos en la forma soslayando el fondo y contribuyamos a crear una conciencia más crítica.



martes, 5 de agosto de 2008

A pesar de todo… palomita para Chávez.


Hugo Chávez me cae mal. Me cae mal por todo lo que representa: su rollo mesiánico (de algo le sirvió su pasado de niño evangelista en los pueblos venezolanos), su discurso demagógico y trasnochado; su arrogancia y cinismo, y, desde luego, lo desafinado que canta las canciones mexicanas. Me cae mal su personalidad y muchas de sus decisiones políticas me provocan malestar. Sin embargo, en esta ocasión (y sin que esto siente precedente) merece una palomita.
Hace unos días, Chávez anunció el interés del gobierno venezolano por comprar el Banco de Venezuela, una filial del Banco Santander, y en España se armó la “remolina”, sobre todo teniendo como antecedente la famosa historia del “¿Por qué no te callas?”.
El asunto es que hace algún tiempo, Chávez había propuesto a Emilio Botín, presidente del Grupo Santander y que en el nombre lleva la penitencia, la compra del Banco de Venezuela pero la entidad española retiró la oferta de venta. Hace unos días, se supo que el grupo de Botín, que por cierto posee el 96% del capital, había intentando venderlo a un competidor venezolano. Cuando éste solicitó al Estado la autorización de la compra-venta, el gobierno la denegó. Entonces Chávez anunció de nueva cuenta su interés por adquirir el Banco de Venezuela, entidad que genera abundantes ganancias que, lamentablemente, no se quedan en suelo venezolano sino que pasan a engrosar los bolsillos de los banqueros internacionales. Al Sr. Botín no le quedó de otra más que sentarse a negociar con Chávez. ¡No que no tronabas, pistolita!
Me parece indecente que bancos como el Santander tengan como principal fuente de ingresos las extraordinarias comisiones que cobran por cualquier servicio que prestan a los usuarios; comisiones que en España, debido a la legislación europea, no se atreverían a cobrar. En México, de los 27 bancos que operan, sólo cuatro –BBVA, Bancomer, Banamex, Santander y HSBC– concentran cerca del 70% de la actividad bancaria, lo que demuestra las prácticas oligopólicas que rigen en el sistema bancario nacional.
De acuerdo con Mario di Costanzo, especialista financiero, asesor parlamentario y ex alumno del secretario de Hacienda, Francisco Gil Díaz, en el ITAM, en el primer trimestre de este año los ingresos por comisiones que recibió la totalidad del sistema bancario ascendieron a 15,747 millones de pesos, cifra que representó más del 115% de sus utilidades netas. Es decir, las comisiones que cobran los bancos son su principal fuente de ingresos.
Con datos de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, Di Costanzo, señala que las cuatro instituciones bancarias mencionadas no sólo concentran el 70% de la actividad del sistema, sino que además detentan el 60% de las casi 39.5 millones de cuentas bancarias y el 66.7% de las sucursales bancarias. Tan sólo el capital español en el sistema bancario mexicano, constituido por los bancos Bilbao Vizcaya Argentaria (Bancomer) y Santander (Serfin), concentran el 40% del mercado mexicano.
Y, encima, gracias a las triquiñuelas de nuestros gobernantes, los nietos de nuestros nietos van a tener que pagar la deuda de los banqueros. Por eso, ¡qué bonito sería que alguien, por una vez, emulara a Chávez y le expropiara algo a los Botínes o los Hernández, que bastante se enriquecen a nuestra costa!

domingo, 3 de agosto de 2008

Ojalá estuvieran aquí. Wish you were here!

Estas son algunas fotos del principio de este verano. Una temporada para encontrarnos con los amigos, visitar nuevos lugares y disfrutar de gente excepcional.


Pierre y Floren en el jardín vertical de La Caixa. Madrid.


Callecita en el centro de Marbella.


Listos para salir a pasear por Marbella.

viernes, 1 de agosto de 2008

El verano ya esta aquí ... con todo y Eurocopa


El verano se había dado a desear pero finalmente llegó y eso quiere decir: vacaciones, rebajas y mucho calor. Algunos me critican por ser tan “pata de perro” pero después de haber trabajado incesantemente desde los 19 años y de haberlo hecho como si tuviera que mantener a dos hijos en Harvard, merezco dedicar mi tiempo a la contemplación y al deleite de las cosas bellas que ofrece la vida. Así que, si no les importa a los criticones, les comparto estas nuevas andanzas.
Empezamos por la Eurocopa, una inmejorable manera de dar inicio a la temporada de verano. Lo que más le agradezco a los organizadores de dicho evento, es haberme dado la sorpresa de mandar a mi querido Anselmo a "cubrir" el suceso futbolístico del año y haber tenido la inmensa felicidad de compartir con él unos pocos días. Aqui les dejo una "perlita" de lo que nos dejó la Eurocopa.
* * * *

“A por ellos…oé”.

Dice Eduardo Galeano que el gol es el orgasmo del fútbol. Y como el orgasmo, el gol es cada vez menos frecuente en la vida moderna. Por eso, hay que ser agradecidos con el reciente banquete de la Eurocopa. Para quienes disfrutamos del mejor fútbol del mundo, es una delicia poder tener un campeonato así. Aquí en España hay un programa de televisión que se llama “Salvados por la Eurocopa”, es decir, ¡nos salvamos de un verano aburrido, sin brillo, sin fútbol, sin emociones!
Ver jugar a Holanda y Rusia fue una gozada, aunque tengo que confesar que mi corazoncito estaba partido en dos porque tengo un amigo holandés (Wilhem) que seguramente sufrió mucho y porque los holandeses me caen a toda madre, y, por otro lado, tengo a mi vecino Giorgui Vassilenko, un fanático del fútbol, quien no pudo ver el partido porque estaba en Granada tocando un concierto para violín de Mozart (a los pies de la Alhambra… ¡bueno, tampoco está mal!).
Yo no pude ver a Croacia contra Turquía (el “patito feo” de Europa), pero dicen que fue un partidazo. Me dolió mucho el triunfo de Alemania porque Portugal era mi equipo favorito. Como muchos de ustedes saben, soy casi promotora turística oficial de ese hermoso país y me hubiera gustado que ganara.
Claro que, para guapos, los italianos y su entrenador. Parecen modelos de Giorgio Armani, ¡qué bárbaros! Pero, hay que confesar, que son unos puercos y nunca le perdonaremos lo que le hicieron a nuestro Zidane en el Mundial de Alemania. Así que,… ¡a por ellos…olé…a por ellos…olé!
Algo les heredamos a los españoles: el sentido del ridículo, las hordas de fanáticos que empeñan lo que no tienen para viajar a Viena y pagarse una entrada en la Eurocopa; Manolo “el del Bombo” que quién sabe qué jabón lo patrocina pero siempre está en los mundiales y eurocopas, la Plaza de Colón llena hasta las manitas de “forofos” vestidos con camisetas de la selección (compradas en los chinos), banderitas, monteras de torero y, desde luego, chupando desde un día anterior. Y, desde luego, la avalancha de estadísticas. “Se rompió el maleficio”, diría “Mi Rey” (como lo saludó en su momento el idiota de Fox) cuando mencionó que hacía 80 años España no ganaba un solo partido en ese fatídico 22 de junio. “Por primera vez, desde 1984, España se mete en semifinales”, gritaba un comentarista deportivo que podría ser primo del Perro Bermúdez. “España vence antiguos fantasmas y su miedo a ganarle a Italia”, decía el titular de un periódico. Otra cosa que nos asemeja a los españoles y los mexicanos es aquello de “hoy si te quiero, mañana no se”. Hace unos meses, todos (y cuando digo todos, es TODOS) los medios de comunicación criticaban a Luis Aragonés por no incluir a Raúl en la selección y ya empezaban a contar los días para su retirada. Hoy, todos los medios aseguran que “Luis, es el mejor seleccionador de la historia”. Así las cosas.
Termino esta crónica, regresando a mi admirado Galeano (por cierto, los amantes del fútbol deben leer su libro “El fútbol, A sol y sombra”). Dice Galeano que antes existía la figura del entrenador, y nadie le prestaba mayor atención. El entrenador murió, calladito la boca, cuando el juego dejó de ser juego y el fútbol profesional necesitó una tecnocracia del orden. “Entonces nació el director técnico, con la misión de evitar la improvisación, controlar la libertad y elevar al máximo el rendimiento de los jugadores, obligados a convertirse en disciplinados atletas… Él cree que el fútbol es una ciencia y la cancha un laboratorio, pero los dirigentes y la hinchada no sólo le exigen la genialidad de Einstein y la sutileza de Freud, sino también la capacidad milagrera de la Virgen de Lourdes y el aguante de Gandhi”.

Cumplieron su promesa y vinieron a Madrid


De espaldas al MUSAC. León.

En esta gustada sección (que cada día va engrosando su contenido), quiero compartir con ustedes algunas fotografías de la visita de nuestros queridos amigos Susy y Pierre. Primero los encontramos en León, donde vive la familia de Floren y paso obligado del Camino de Santiago. Contamos con la generosísima hospitalidad de Carmen, la mamá de Floren, y con los múltiples rincones de la región. Como amante de los buenos vinos, a Pierre le gustaron los del Bierzo, sobre todo los de Prieto Picudo (no, no es el nombre del dueño del bar, sino de la uva típica de esta zona del norte de España). Visitamos el MUSAC, museo de arte contemporáneo de Castilla y León; la imponente Catedral de León (de las poquísimas en España que no cobran la entrada y que ofrece los mejores vitrales del país) y también las espectaculares hoces de Vegacervera.
En el Bar Camacho. Madrid.

De regreso de su viaje a Portugal, nuestros queridos amigos pasaron dos días en Madrid. Fueron pocas horas, pero muy intensas. Entre otras cosas, visitamos uno de nuestros bares predilectos, el Camacho, para que Susy tomara el vermú de grifo que tanto le gusta; estuvimos en el Museo Sorolla, una verdadera joya pocas veces frecuentada por las hordas de turistas veraniegos, que a Pierre le encantó, y disfrutamos de nuestro mutuo cariño.


Museo Sorolla. Madrid.

Próximamente, Floren y yo los visitaremos en su casa de la playa en Francia, La Palmyre. Ahí celebraré mi cumpleaños con quienes son parte de mi hermosa familia.

Los muchos maridos de Ángeles

Y ya que estamos celebrando la llegada del verano, y aqui me refiero al europeo con sus calores, sus largos días que se apagan a las 9 de la noche y las vacaciones que nos sirven para encontrar a los amigos y leer todos aquellos libros que hemos acumulado para le temporada; aprovecho la ocasión para compartirles esta nota que escribí para la revista Marie Claire, a propósito de la presentación del reciente libro de Ángeles Mastretta en España. Un buen día mi querido amigo Jacobo de Arce, editor de la sección de cultura de la revista, me llamó y me preguntó: "¿Conoces a Ángeles Mastretta? ¿Qué opinas de ella? ¿Te gustaría entrevistarla para la revista?" Esta fue mi primera chamba para Jacobo y éste el texto de la entrevista vía telefónica que hice a la Mastretta. Es un libro muy divertido.

* * * *


“A muchos la felicidad los empalaga”, y el marido de Amanda era de éstos. “De repente le dio por tener miedo y se fue”. En Maridos, el más reciente libro de la escritora mexicana Ángeles Mastretta, la pareja es el epicentro de un delicioso montón de relatos que hurgan en algo tan insondable como la vida cotidiana y la nada fácil convivencia entre hombres y mujeres.

Esta nueva propuesta literaria de la autora de Arráncame la vida, esta dedicado más que a los maridos, a las mujeres “que los padecen y los gozan; que conviven con ellos en armonía o con juego. Evidentemente se trata de maridos vistos desde los ojos de sus mujeres”. Narraciones las hay de índole variopinta a lo largo de sus 250 páginas; su mirada contempla distintas épocas y desgrana lo que ocurre en clases sociales diferentes. Las mujeres de estas historias rompen cadenas y tabúes, aunque a veces ni siquiera se den cuenta, de un modo valiente y con enorme naturalidad, “incluso aquéllas que sobreviven a que se les mueran sus maridos o que éstos desaparezcan con sus amantes; son mujeres que cambian sus vidas siempre con una sonrisa y nunca sintiéndose heroínas de una batalla excepcional”. Mastretta añade que las protagonistas de estas nuevas crónicas “abundan por todas partes, haciendo sus caminos y defendiendo su modo de vida y sus emociones, con valor y con inteligencia”.

La escritora de Mal de Amores, obra que fuera galardonada hace una década con el prestigioso premio literario Rómulo Gallegos, pone el dedo en la llaga sobre una de sus constantes preocupaciones: la de las mujeres maltratadas por “hombres a los que hay que dejar, de los que hay que huir”. Sobre el tema, Ángeles Mastretta acota que últimamente ha estado muy involucrada en la creación de una red de refugios para mujeres que sufren de violencia de género. “Son refugios que las rescatan de situaciones límite. Empezamos con cinco casas y ahora tenemos 31. Llega todo tipo de casos, algunas –como las compañeras de los narcotraficantes- están muy golpeadas y asustadas; son muy difíciles de cuidar porque las persiguen hasta donde ellos quieren y tienen poder para hacerlo”.

Maridos, editado por Seix Barral, sale a la luz en España a mediados de noviembre, y como ocurre con todos sus anteriores libros, la autora de El cielo de los leones espera que “él mismo vaya abriéndose su camino”.
Ángeles Mastretta se define como una “coleccionadora de historias de seres empeñados en que la vida vale la pena”. Por eso, cuando alguien le dice que sus temas son superficiales, respinga y argumenta, “No, yo creo que hay una enorme profundidad en aceptar qué es lo que nos pasa y el hecho mismo de que vivir es un privilegio”.
Una vez más, a través de la luminosa palabra de Mujeres de Ojos Grandes, los eternos conflictos del individuo como la infidelidad, el dolor, la soledad, o el amor, cobran cuerpo y alma gracias a la galería de sus personajes que nunca nos son ajenos ni distantes.